.*.*.*.*.*.*.*.*.*.*.
Sabemos que el santoral y personajes bíblicos son muy citados en
nuestro refranero. En este caso se nos cuenta que la santa en
cuestión, Santa Rita de Cascia, abogada de los imposibles, fue recriminada así por una muchacha que le pedía novio. Al parecer hubo pretendiente, pero desapareció pronto, por lo que la muchacha se quejó a la Santa con esta frase.
Así pues, podemos escuchar esta recriminación (claramente opuesta a la más resignada - atribuida al paciente Job- : él (el Señor) me lo dio, él me lo quitó...) cuando se reclama la devolución de aquello que hemos dado o prestado.
Tengamos en cuenta también, con relación a esto de los regalos y
préstamos, que el refranero nos avisa: "lo olvidado, ni agradecido ni
pagado"; por tanto, cuando nos sintamos generosos, mejor no esperar
nada a cambio "haciendo el bien, sin mirar a quién". Seguro que nos
llevaremos así menos decepciones.
.*.*.*.*.*.*.*.*.*.*.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por comentar. Un saludo.